15-09-2009
© nuestromundoysusdesafios
El compromiso con el editor del Blog era completar en un mes una serie de artículos, que sin pretender ser un compendio exhaustivo, dieran una visión del autor sobre la política económica en la etapa de los Kirchner. Por razones de actualidad he venido abordando otros temas relacionados con lo que podríamos llamar Cuba y satélites ideológicos.
Mi cercanía e interés en ambos países tiene diversos orígenes, pero uno de ellos tal vez pueda llamar la atención; aunque parezca inverosímil, pero ahí está idiosincrasia de ambos pueblos, los cubanos son los argentinos de la parte norte del Hemisferio de América, y los argentinos los cubanos de la parte sur.
(Había escrito “a mi modesto entender” en el párrafo anterior, pero no creo que sea adecuado en el contexto de este artículo)
Les une la exuberante brillantez en la forma de hablar y adornar su lenguaje, la fratricida disputa para ver quién es el orador más brillante, la elocuencia de decir poco o nada sin que el auditorio pierda interés, las discusiones interminables, el saberlo todo de todo, el constante afán de protagonismo, … , la escasa (?) modestia, …, la triste complacencia en que por hablar mucho, y muy bien, se justifica desafortunadamente el hacer muy poco, … , el triunfo de tantos y tantos profesionales fuera de sus fronteras.
Para cumplir el compromiso con el Editor y que los lectores tengan una continuidad en los artículos, se vuelve a incluir el primer artículo de la serie dedicada a la Kirchnereconomía.
Información de interés.
No quería terminar sin dar una información que es poco conocida; Néstor Kirchner en 1994 y 1998, impulsó reformas en la constitución de su provincia, Santa Cruz, para incorporar la posibilidad la reelección indefinida –tal vez sería mejor decir su- a gobernador.
La Argentina, Kirchnereconomía. El Pasado. Marco Aurelio
12-08-2009
La llegada al poder de Nestor Kirchner el año 2003, en medio de un marasmo económico terrible para La Argentina que revivía en las mentes de todos los argentinos la posibilidad de retomar en lo económico la página más oscura de su historia, la Dictadura Militar posterior al desastre a la vuelta del General Juan Domingo Perón a La Argentina desde su exilio en España, fue un asidero de esperanza para el pueblo argentino desencantado por el escaso lapso del poder del Partido Radical, tildado en La Argentina de honrado, parece que poco importa eso, pero en contrapartida de inoperante e ineficaz.
Memoria laxa la de los argentinos, olvidando que el inicio del terrible periodo militar fue auspiciado por el propio Peronismo por la entonces Presidenta “Isabelita”, y que la mayoría de las crisis económicas tuvieron su origen en las lamentables políticas económicas y gestión de los gobiernos del Partido Justicialista desde el inicio de su llegada al poder..
En el fondo, en la forma y en la piel ¡todos los argentinos somos peronistas!, La Diosa Argentina creó al Peronismo a través del General Juan Domingo Perón para darse forma a sí misma. Perón fue el hijo ungido de sus entrañas por la Diosa Argentina para moldear un nuevo futuro, un nuevo pueblo, un nuevo país, …
Juan Domingo Perón en su estancia en Italia como agregado militar de La Argentina fue un gran admirador del Il Duce, Benito Mussolini. El fascismo italiano le sirvió de base para crear el Justicialismo, basado en el nacionalismo, el populismo, impregnando a la sociedad con el clientelismo y el culto a la personalidad.
El Peronismo se convirtió en la esencia de La Argentina, como La Argentina se convirtió en Peronista, … , finalmente querámoslo o no en La Argentina “Todos somos peronistas”.
En el Justicialismo –en La Argentina en suma-, cabían ´simultáneamente la Triple A de extrema derecha del Brujo López Rega y los Montoneros de la extrema izquierda, más allá del Partido Comunista.
Fuera de la marea del Justicialismo movimientos profundamente ciudadanos y democráticos, fruto de una nación con una cultura y educación en los primeros niveles del Mundo desde la primera mitad del Siglo XX, encabezados por el Partido Radical con su líder histórico Raúl Alfonsín, que finalmente fue Presidente de La Argentina, y junto a estos movimientos de corte centrista y democrático, las tristes y lamentables intervenciones del Ejercito que conllevaron adicionalmente pésimas políticas y mala gestión de la economía del país.
La política económica del Peronismo/Justicialismo, a excepción de la cirugía imprescindible en parte del gobierno de Menem, siempre se caracterizó por el intervencionismo, la fijación y alteración de los precios por la subvención de los precios de servicios e insumos públicos –gasolina, electricidad, agua, gas, …-,
y la creación de una correa de transmisión sindical/gremial y popular simbolizada por los “piqueteros”, apoyada en una primera etapa por la indudables mejoras para los trabajadores.
La Argentina, tercer país por renta per cápita a inicios del Siglo XX, con enormes riquezas de ganadería –más de tres cabezas de ganado por habitante, agricultura impresionante en todo tipo de cereales, pesca, minería, recursos hidráulicos, petróleo, gas, …, pudo por relativamente poco tiempo mantener el modelo peronista, … pero quedó hipnotizada –tal vez sería más propio decir idiotizada-.
Tal vez para mucha gente humilde quede sólo la parte positiva, el Justicialismo le daba gratis todos los servicios públicos, y subsidiaba buena parte los precios, además de haber establecido las mejoras más importantes en el siglo XX al marco de relaciones laborales y los “malos” eran lo que intentaban arreglar los efectos de los desmanes peronistas.
En la vorágine de La Argentina, atrapada y esclavizada por sí misma, amante masoquista de su propio sufrimiento, necesitada de su propia neurosis, orgullosa de psicoanalizarse a través de todos sus poros, tragedias y vaivenes. …, sintiéndose todavía el ombligo del Mundo cien años después de que alguna vez estuvo cerca de ocupar ese lugar y a la vez no entendiendo –o no queriendo entender ¡y van sólo cien años! - ¡porqué nos va tan mal!,- …
Finalmente y como anestesia social y catarsis (positiva ?) un país deseando reencarnarse en si mismo -en peronista- , pensando en el fondo en que todo nos llegue del Papá Estado y sigamos teniendo tiempo para discutir y discutir, tras la caída en el caos económico con el radical Fernando de la Rúa, y una transición interina del peronista Fernando Duhalde nombrado por la Asamblea Legislativa, … , ¡Llegó el Presidente Nestor Kirchner!
La Argentina volvió a ser La Argentina, perdón ¡Peronista!
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